En China, primer país en probar la desescalada, y como posible lección para España, más de la mitad de los consumidores demanda mayor expansión del online y del home delivery y de la salud en los lineales.
Tras dos meses de cuarentena, el consumidor inicia su particular desescalada, dibujando un nuevo perfil que traerá más preocupación por el ahorro. Heredado de la pasada crisis económica, que provocó que la sensibilidad al precio creciera del 52% de los consumidores en 2009 al actual 67%, la vuelta a la normalidad intensificará su preocupación por el control del gasto, según Nielsen.